Al final he llegado, aquí estoy otra vez, en verano. Después de estar muy atareado y con buenas noticias por fin puedo dedicarle tiempo a Quien dijo miedo y sobre todo a vosotros, mis lectores.
Este post está dedicado a los fines de semana que, aunque estemos en verano y perdamos la noción del tiempo y de los días, siguen sabiendo de una manera mas especial y que menos que dedicarle un post.
Los mejores planes suceden en fin de semana, es verdad, está probado, no científicamente pero todos lo sabemos. Una escapada a una cala recóndita e íntima donde el único murmullo es el de las olas de mar rompiendo en nuestros pies a la orilla, una barbacoa con amigos alrededor de una piscina azul turquesa de agua cristalina o simplemente una terracita con encanto chill out o vintage en la que nos relajamos con música de ambiente y unas velas.
El verano es para disfrutarlo, aunque estemos mas o menos atareados siempre hay un huequito para relajarnos y que mejor manera que esa.
Espero que os estéis pasando un verano fenomenal, divirtiendos muchísimo y sobre todo que experimentéis algún cambio en vosotros mismos, siempre para bien, como sucede todos los veranos.
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